jueves, enero 27, 2011

Por qué el Kindle (o por qué no) (y II)

Ya comenté por qué para mi propósito de leer más había apostado por un lector de libros electrónicos y qué ventajas sobre un tablet veía. Quedaba pendiente explicar por qué aposté por el Kindle frente a otros lectores.

El punto fuerte del Kindle es que es un buen hardware (sobre todo la pantalla) por un precio más económico que cualquier otro dispositivo con tinta electrónica. Supongo que a la mayoría de la gente le sobra con esto, sobre todo considerando que hasta que sus rivales no se actualicen también el Kindle puede presumir de una tinta electrónica con mejor contraste y tiempo de respuesta.

Vale, no corras todavía a comprarte uno. También hay puntos polémicos que hay que valorar con calma antes de decidirse por el Kindle. Amazon ha hecho un lector para su tienda de libros y tiene tanto un DRM como un formato de ebook distinto al de los demás (el estándar de libros electrónicos es EPUB, mientras que Kindle usa un par de formatos propios).

A título anecdótico, la incompatibilidad con el DRM lo es hasta con www.mobipocket.com, otra tienda de libros electrónicos de Amazon que cuenta con algunos libros como diccionarios no disponibles en amazon.com. La "rareza" de esta incompatibilidad está en que Amazon tras su compra de mobipocket usó su formato de fichero para desarrollar el Kindle, pero en el caso del DRM lo ha hecho deliberadamente incompatible haciendo unos cambios mínimos sin otro propósito.

Los libros comprados en Amazon con DRM sólo se podrán leer en el Kindle o con el software de Amazon (lo hay para Android, Windows, MacOSX e iOS, pero hay que tener en cuenta que el software es más limitado y por ejemplo no permite búsquedas en un diccionario). En cualquier caso, todos esos libros se perderán si se migra a otro dispositivo de tinta electrónica que no sea el Kindle. Técnicamente los que tengan formato AZW o mobipocket se podrían reusar usando un programa que los quite el DRM, pero sería ilegal (tanto por el hecho de poseer una herramienta que elimina el DRM como por violar la licencia de uso de los libros).

Esto no quiere decir que con el Kindle sólo puedas leer libros comprados a Amazon: cualquiera puede convertir un libro a mobipocket, uno de los formatos del Kindle, utilizando por ejemplo Calibre, que es software libre,o bien un servicio gratuito de Amazon. Es más, irónicamente mientras que el servicio de conversión de Amazon no soporta ficheros EPUB, la herramienta gratuita que Amazon ha creado para que los autores puedan convertir sus libros a formato Kindle y venderlos en su tienda, lo que hace es importar ficheros en formato HTML o ¡toma sorpresa! formato EPUB.

Una vez convertido el libro, que lo reconozca el Kindle es tan simple como usar el puerto USB: se puede montar como si fuera un pendrive con 3GB, hay una carpeta para los libros o usar el propio calibre. También es posible descargarlo de una web usando la conexión Wifi.

Ahora bien, sólo se pueden convertir libros que no tengan DRM: la mayoría de los libros que se venden llevan DRM. Esto es un problema para quien quiera comprar libros en español: el catálogo de Amazon es muy pobre en nuestro idioma, pero las editoriales españolas y las librerías como FNAC, Casa del Libro o Corte Inglés sólo venden libros con DRM de Adobe (y Amazon no soporta más DRM que el suyo).

El tema del DRM tiene mucha "chicha" y sería largo comentarlo en esta entrada junto con los demás temas. Pero no me resisto a decir que para mí toda esta historia del DRM fue un motivo más a favor que en contra del Kindle, aunque suene absurdo.

El motivo es un tanto anarquista. El DRM, además de ser totalmente ineficaz, es un problema y cuando más claro se vea que es un problema, antes reventará. En cambio todo lo que contribuya a suavizar alguno de los problemas del DRM mantendrá vivo el moribundo. Uno de los problemas prácticos del DRM es la torre de Babel entre DRMs (B&N, Amazon, Apple, todos ellos usan DRMs incompatibles, lo que quiere decir que una persona si cambia de lector pierde sus libros). Sin embargo, en la actualidad esto en apariencia estaría cambiando, porque la mayoría de los lectores soportan al menos el DRM de Adobe. Como Kindle no soporta este DRM "esperanto", cuanta más gente tenga el Kindle, más en evidencia quedarán los problemas del DRM y su torre de Babel.

Es perfectamente factible vender libros sin DRM (como ha terminado pasando con los MP3) y de hecho algunos vendedores como O'Reilly así lo hacen ya. Para los vendedores tiene la ventaja de poder vender libros para el Kindle sin tener que usar la tienda de Amazon y perder entre el 30 y 65% del precio e igualmente poder vender para otros dispositivos sin tener que pagar por cada venta a Adobe. Para el comprador comprar sin DRM es saber que puede cambiar de dispositivo y conservar los libros, sin más trámite que todo lo más hacer una conversión de formato.

Amazon permite al vendedor elegir entre usar DRM o no (aunque parece ser que no da esta misma libertad con mobi , pero el comprador también debería saber cuándo un libro tiene DRM o el formato TOPAZ (unos pocos libros de Amazon, no recientes, usan este formato que es más difícil de convertir). Así mismo Amazon debería abandonar la tontería de "licenciar" los libros: da igual que sea un ejemplar físico o electrónico, el comprador debería tener los mismos derechos, que básicamente son hacer lo que le de la gana con él menos realizar copias y distribuirlas.

Otro punto a cuidar por Amazon es la privacidad: que el usuario pueda controlar exactamente qué información se transfiere a Amazon. Y la promesa de que en ningún caso se transferirá nada referente a contenidos que no procedan de la tienda de Amazon (por ejemplo un libro adquirido en O'Reilly y transferido por USB).

3 comentarios:

Chema Peribáñez dijo...

El lector de B&N sí lo soporta (usa un DRM propio en su librería, pero el Nook sí permite leer además libros de otras librerías si usan el DRM de Adobe Digital Editions). El iPAD aunque no lo soporte el programa de Apple, lo soportan varios programas de terceros (al menos tres independientes, sin contar alguno más que habrá específico de alguna plataforma).

En la web de Adobe Digital Editions viene la lista de dispositivos y es bastante larga (http://blogs.adobe.com/digitalpublishing/supported-devices); en la práctica quien se ha quedado fuera es Amazon.

Por Digital Editions han apostado también Google para su tienda de libros (que publica una aplicación para el iPad) y varias bibliotecas de Estados Unidos :-(.

Para soportar Adobe Digital Editions en un dispositivo en teoría sólo hace falta una librería que proporciona Adobe, pero el tema es que hay que llegar a un acuerdo individual entre fabricante y Adobe para poder usarla.

Adobe le echa mucho morro al pretender equiparar que si EPUB es el formato ebook estándar, Digital Editions es el DRM estándar (como se ve en la entrada del blog de Digital Editions en que critican a Apple por haber usado EPUB pero no su DRM), cuando luego tienen todo el control e imponen las condiciones y pueden cambiarlas para futuros dispositivos o versiones del servidor (además de cobrar por cada transacción).

Sobre el DRM en ibook de Apple, hay un artículo que se queja que Apple no permite publicar sin DRM (al igual que Sony) pero luego hay un comentario de alguien que afirma que Apple sí deja, que el problema es que el que ha escrito el artículo habrá utilizado (como la mayoría de la gente, al ser lo que la propia Apple recomienda) los servicios de una tercera parte, que no parecen estar ofreciendo la opción de publicar sin DRM.

Sobre quien tiene la responsabilidad del DRM, si las editoriales o Amazon/Apple y compañía, no tengo tan claro que los únicos culpables sean las editoriales, más bien creo que las están timando. El DRM simplemente no funciona (sobre todo el del Kindle, que es de coña) pero lo venden como que sí y prácticamente te están diciendo que lo pongas. A Amazon le viene de perlas para tener el monopolio de venta de libros para su cacharro, pero cubriéndose las espaldas ante acusaciones de abuso de posición, porque técnicamente cualquiera puede no sólo subir al Kindle libros adquiridos en otros sitios usando un PC, sino comprarlos y descargarlos directamente usando el navegador y una conexión Wifi: sólo hace falta que la librería, como hace O'Reilly, los ofrezca en edición Mobipocket (fácil de convertir desde EPub) pero eso sí, sin DRM. Apple en su software iBooks es parecido (creo eso sí que no puedes descargar directamente si sólo tienes ibooks sino que hay que usar iTunes desde un PC para transferirlos), sólo que como hay programas de terceros, no le salen las cosas y al tratar de cambiarlas sólo está logrando poner de uñas a todo el mundo.


Curiosamente, Amazon permite publicar sin DRM en Amazon.com, pero no en su tienda de Mobipocket.

El sitio que más me ha llamado la atención con el DRM es Lulú, dónde tratan de inclinarte a que uses el DRM (usan el de Adobe) pero al menos repercuten en ese caso el gasto directamente en quien publica, 0.10$ por descarga. En esta web te dan la opción de usar o no el DRM para las ventas en su propia tienda, pero cuando permites vender también en webs de terceros te dicen que ahí puede decidir la tienda (y la única que tienen es la de Apple).

Sobre Adobe Digital Editions y Linux, pasan de sacar una versión (como pasan los de Amazon) aunque parece que se puede ejecutar con Wine. La librería para dispositivos obviamente sí que va sobre Linux, dado que es la plataforma que utilizan prácticamente todos los lectores de tinta electrónica (y posiblemente el "prácticamente" sobre :-) ).

Chema Peribáñez dijo...

Elena: el Kindle de por sí no es capaz de leer libros en formato EPUB, primero tienes que convertirlo con un programa como Calibre. Si tienen DRM, en teoría no se pueden convertir y no podrías leerlo en el Kindle.

Afortunadamente, en la práctica quitar el DRM con el que vienen los EPUB que se venden en las tiendas online españolas como Casa del Libro, FNAC o TROA es bastante sencillo, hay programas que hacen casi todo automáticamente (realmente aquí se ve como el DRM no sirve para nada).

No te voy a poner el enlace al tutorial en español sobre cómo hacerlo, pero si buscas en Google prácticamente con cualquier frase que se te ocurra sobre quitar DRM en libros, te va a salir.

En cuanto a librerías en español, si no importa tragar con lo del DRM y usar un programa de estos para quitarlos y convertir al formato del Kindle, puedes ir a la página de Libranda y te saldrán las librerías online asociadas.

Lo que es increible es que por culpa del DRM, que complica la forma de comprar el libro también, es más rápido encontrar un libro pirata en Internet ya convertido a Kindle, que comprarlo.

Algún libro de Libranda no tiene DRM (como los de Lorenzo Silva) pero lamentablemente la mayoría sí y lo peor es que la mayoría de librerías ni te dicen si tiene o no DRM.

Unknown dijo...

Hay que diferenciar respecto al Kindle el contenido del hardware. Compre un Kindle hace poco y hasta ahora no he comprado ningún libro con DRM, gracias a que los descargo de Internet y los convierto con Calibre, desde casi cualquier formato hacia el formato MOBI o RTF, ambos soportados por el Kindle.
Entonces, el problema no es realmente el dispositivo Kindle, sino el servicio de venta de libros.